Al amor…

Annie Hall

¡Lo confieso!; 

No tengo por que escribirte, no existe nadie.... 

y créeme no quiero nada, ni arrullos, ni flores, 

ni nubes que cubran por momentos al aire. 

No quiero Mandrakes; ni magos ilusionistas 

que aparezcan de la chistera tú suave sonrisa. 

No quiero ir por el rumbo de los absurdos caminos que me lleven a ti.

No necesito besos congestionados de besos; 

ni el amargo sabor del desencuentro en mi boca, 

ni regalarme a  momentos, y en cada tiempo mi tiempo; 

no me interesas amor, no existes aquí; así no me vales.

No quiero sentirte a detalles por las 4 esquinas de mi vida, 

no quiero sufrirte de ninguna costilla; 

no tengo interés de juntar tus pasos con mis pasos, 

de buscar el encuentro de tu mano con mi mano,  

 no quiero nada que me diga donde estás; 

¡no quiero ni un solo suspiro en tu honor!; 

no deseo ninguna de esas curvas que dejaste en mis recuerdos, 

no quiero más noches desnudas plasmadas en la piel, 

ni en cada parte, ni en cada sueño; ¡no me interesas amor!, de nada me vales.

No quiero por suerte tenerte y  cuando quieras perderte 

y de nuevo sufrirte, y después a llorarte, no quiero nada de ti. 

No tengo ansiedad en buscarte, y está demás encontrarte; 

no quiero construir en castillos de arena la tonta ilusión, 

no quiero verte tan cerca, ni aquí, ni allá…. ¡no te quiero así!.

Me interesas amor en lo simple que es una mañana sin ti, 

me interesas al derramar sin querer en cada gota el café; 

me interesas cuando te leo, cuando te cuento, cuando te escribo; 

me interesas cuando me burlo de ti a carcajadas… en lo burdo de las palabras, 

¡me gustas así!.

Me gusta poder deletrearte y aburrirte, ¡más aburrirte que deletrearte!; 

me gusta jugar a conjugarte en cada momento, 

en cada rincón; me gusta no sentirte, ni añorarte, 

me gusta que estés solo así, de esa forma, sin dudas, ni celos o extraños dolores. 

Me gusta CLAUSURARTE, encerrarte entre denuncias, debates y alegatos, 

sin mensajes baratos “que si te tengo, que si no te tengo”; 

sin complejos o excesos; con distancias y medidas exactas; 

me gustas así….¡me encantas así! solo en las letras, solo en poesía. 

Me gustan las noches en donde te vuelves parte integra en el sello de mi pasado, 

cuando no alucino y no te pienso demás; 

cuando estás “en lo muy poco” de donde puedes estar. 

Me gustas ahí,  apartado y solitario mi querido amor… 

Me gustas así, no de otra forma, solo en palabras, de a momentos, en velorios, entierros, me encantas así amor. René M. Kueyatl